Giovanni Cioni es un cineasta desorientado. Lejos de las costumbres, su cámara se convierte en exploradora, transformando el entorno que pasa a su alcance en territorio desconocido. Su mirada trastoca los códigos del documental. Desdibuja las líneas entre realidad y ficción. Desarrolla nuevos espacios, nuevas temporalidades, de las que emergen humanos que parecen surgir de un otro lugar impalpable. Finalmente, en su enfoque, el ojo construye una realidad, aprehende el entorno sin certezas. Su huella única está hecha de la huella de un hombre en investigación y de la mirada de un gran cineasta